Podría decir que es sincronía de horario... de esquina... de barrio... no se como etiquetarlo, la verdad es que es lo que es...
Yo creo que nada es al azar, que cada momento, cada persona está en el lugar indicado, ahora no se si será eso que llamamos destino...al menos no creo en el destino, si creo en las casualidades, en las sincronías, en una gran trama que se arma como un Mandala que nos une y des-une en un gran movimiento circular...
Hace un año ya que nos encontramos en el mismo paradero (Transantiago), el comienzo de mis días en este barrio fue triste, luego de una separación llegue con mi hija a vivir en casa de mi padre, y bueno fue así como todos los días coincidíamos los mismos... algunos comenzamos a cruzarnos miradas y de pronto el pequeño hola se fue convirtiendo en un encuentro entretenido...
El cuadro era así... en la vereda del frente "el negrito" el que casi no miraba, pero de timidez... un aire extranjero, una sonrisa esquiva y mi hola, este era mi trofeo ya que fui la primera que cruzaba palabras con el, no me duró mucho el trofeo...esto porque la hermana de una de mis "amigas de bus" tuvo mas desplante y le conversó, fue rápida o el cubanito estaba muy solito, como sea pero la conquista ocurrió. Días después nos reíamos cuando comentabamos con Cecilia, puchas tu hermana era de otra esquina y vino a revolverla aquí.... ahora se esperan, son còmplices, se bajan del bus de la mano y así es la cuestión no mas ocurrió y los unió cuando tenia que ser...
Con Cecilia fue la primera que comenzamos hablar, ya ella tenia algunas amistades, su estadia en este barrio se remonta desde su niñez y ya cruza los 40...
Caroline mas joven y guapa también esperaba el bus llamándolo " la desgraciada" (no pasaba nunca) , y así comenzo nuestra amistad, todos los días nos encontrábamos y comentabamos de a poco nuestras vidas, nuestros días.
Cecilia casada, con un matrimonio con algo de rutina, algo de incomunicación, como todos... en crisis, que me recordaba el porque de mi situación....
Caroline pololeando, flirteando... mientras sonreía nos contaba sus historias, que por cierto amenizaban la espera y el traslado en el metro. Su pololo, su admirador de oficina que llegó a remover su pololeo ya un poco tibio, sus encuentros y desencuentros que a esta altura la tienen observando desde lejos cualquier relación.
Tambien hay otros protagonistas que comparten la espera ... como el Abogado, al que le digo el corredor ya que es muy deportista, este pequeño momento de encuentro que me deja un grata sensacion de conexion con otros seres que pueden ser demasiado extraños en tu vida pero si te acercas un poquito, puedes darte cuenta que todos somos iguales, siempre habrá puntos de encuentros...
Y así ocurre la amistad de bus... ya hace días que no nos encontramos, no ha funcionado esto de la sincronía, con Cecilia ya somos amigas de msg, de facebook y hoy planeamos un encuentro entre las tres en algún bar para seguir compartiendo y aparte de seguir encontrándonos en el paradero no perder la amistad y continuar armando este gran mandala que nos toca vivir....
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